Aceites para coches deportivos
Operación de la máquina

Aceites para coches deportivos

Aceites para coches deportivos Cada vez aparecen más coches con motores de gran potencia en las carreteras polacas. El diseño de motores de automóviles deportivos se distingue por la precisión del trabajo y la alta calidad de los elementos que interactúan. El resultado son requisitos cada vez mayores y altamente especializados para los aceites de motor.

Los requisitos de lubricante varían según el diseño del motor. En motores de velocidad extremadamente alta, como los que se usan en los autos de Fórmula Uno, los aceites con una viscosidad de -1W-5 (digamos: Aceites para coches deportivosmenos 5W-10) con un índice HTHS (viscosidad a alta temperatura) muy bajo. Los aceites de este tipo requieren bombas muy eficientes, conexiones herméticas del motor y presiones del sistema de lubricación extremadamente altas. Sin embargo, garantizan una baja resistencia interna del motor y ayudan a obtener la máxima potencia posible.

Por otro lado, los aceites de muy alta viscosidad, como 10W-60 o incluso superior, funcionan mucho mejor en muchos diseños. Estos tipos de aceites no tienen propiedades de ahorro de energía, pero le permiten compensar las diferencias en el ajuste del motor. La alta viscosidad del aceite permite el llamado sellado de componentes del motor que están menos sujetos a estrés térmico y tienen un ajuste más flojo, así como donde la carga es muy alta y el cambio de ajuste es significativo. Un ejemplo de elemento sometido a cargas muy elevadas es un pistón, que al calentarse amplía sus dimensiones, quedando muy ajustado en la camisa del cilindro.

La elección entre aceite de baja y alta viscosidad también depende del propósito del motor. Para el motor se suelen elegir aceites de baja viscosidad, que están diseñados para un recurso más corto y la prioridad del conductor es su potencia con el fin de minimizar la resistencia de la unidad de potencia. Gracias a esto, es posible obtener algunos caballos más. Sin embargo, el uso de lubricantes con una viscosidad de aceite muy baja conlleva costes de fabricación muy elevados para las piezas del motor. Los ajustes en los motores lubricados con estos aceites son muy precisos y los materiales deben seleccionarse cuidadosamente. Además, la baja viscosidad del aceite implica una vida más corta de toda la estructura del motor. En deportes como la Fórmula 1 Aceites para coches deportivosesto es bastante aceptable, y es esta tecnología la que está liderando el camino en los motores de los autos deportivos de hoy.

Por otro lado, elegir un aceite de muy alta viscosidad tiene muchas ventajas en términos de compensar varios aterrizajes del motor. También son resistentes a grandes cambios en la temperatura de funcionamiento. Los aceites con características de rendimiento modernas, por ejemplo, con una viscosidad de 10W-60, le permiten arrancar el motor incluso a temperaturas inferiores a -30ºC y, a veces, incluso a -40ºC. Al mismo tiempo, la alta viscosidad no permite rasgar la capa protectora de la película de aceite al lubricar componentes especialmente cargados térmicamente, como pistones o piezas de turbocompresores. La estabilidad térmica proporciona un alto grado de protección durante una larga vida útil.

Calidad del aceite

Las propiedades protectoras de los aceites no solo están relacionadas con la viscosidad del aceite. Un parámetro importante es la calidad del aceite, que depende en gran medida de los aceites base y del paquete de aditivos. Los aceites de motor modernos, como Castrol EDGE 10W-60, funcionan bien en operaciones a largo plazo a altas temperaturas, bajo cargas pesadas y velocidades máximas. Los aceites más utilizados en los coches deportivos son los ésteres. Son bases sintéticas. Tienen parámetros más altos que los aceites sintéticos convencionales (basados ​​en PAO). Gracias a estas bases, las propiedades del aceite están en un nivel muy alto, y el paquete de aditivos le permite lograr las propiedades protectoras y de limpieza adecuadas, así como la estabilidad en condiciones de operación inusuales. Tal estabilidad inusual es, por ejemplo, la baja volatilidad del aceite, por lo que, incluso a las temperaturas de funcionamiento más altas, el aceite no cambia sus características físicas y químicas. La alta resistencia al corte mejora la protección contra el desgaste, mientras que la eliminación rápida y eficiente de los productos de combustión y el combustible no quemado mantiene la transmisión limpia.

Añadir un comentario